Sacar fotos es captar luz. Con las cámaras analógicas (las "de toda la vida") sobre una película y ahora con un sensor dentro de la cámara digital. La lente se abre, deja pasar la luz y se cierra de nuevo. Igual que la pupila del ojo se abre (dilata) más para dejar entrar más luz cuando estamos a oscuras o casi cerramos los ojos cuando hay demasiada, la cámara abre más o menos su "ojo" para ajustarse también. Cuanto más tiempo abierto más luz. Calcula también la distancia hasta lo que quieres sacar para enfocarlo, igual que nuestro ojo, etc. En versión simplificada de la teoría.
Para sacar fotos, primero hay que hacerse con una cámara. Cuando estuve buscando qué comprarme lo que realmente miraba era la calidad de la lente y el sensor. Los megapixels, de los que a la gente tanto le gustaba hablar, no eran importantes. A menos que se quiera empapelar el cuarto con fotos en papel tamaño póster, no creo que se necesiten doce megapixels para prácticamente nada. En pantalla, que es cómo se ven principalmente hoy en día, o en papel en los tamaños estándar, se necesita mucho menos. Por no hablar de blogs, Facebook y varios donde se necesita bien poco. Por no usar todos los "palabros" que se utilizan en las especificaciones técnicas para definir la luminosidad etc, el consejo sencillo: ir a un sitio web donde se comparten fotos de calidad media (flickr o similar) y ver ejemplos por tipo de cámara + leer reseñas en webs especializadas donde se comparan distintos modelos. Yo quería algo que tuviera un control manual al menos mínimo, del tiempo de exposición (explicado por abajo) y alguna cosa más. Eso más la mejor lente entre las automáticas, que pudiera sacar fotos decentes en situaciones de luz complicadas: de noche, contrastes... Viendo ejemplos y alguna review al final me decanté por una Canon Ixus 850, que era de lo mejor hace cinco o seis años.
Sí, una compacta, nada de réflex grande. No las descarto a futuro, pero me daban y siguen dando un poco de pereza. Permiten hacer muchas cosas que con una compacta no se puede hacer y es cierto que cuanto mejor la cámara más sencillo sacar buenas fotos, pero "no hace el hábito al monje" :P sobre todo viendo muchos con grandes cámaras sacando malas fotos o sin salirse del modo más automático posible.
Analizando la cámara. No utilizo el zoom digital para nada. Mientras que el óptico es realmente útil para acercar objetos o paisajes lejanos, el digital es mejor ni tocarlo, tanto que en mi cámara lo tengo desactivado. Lo único que hace es recortar la imagen bajando la calidad, para lo cual es mejor dejar el tamaño original y posteriormente cortarlo en el ordenador. En este caso sí que utilizo el tamaño máximo de foto que permite la cámara.
Flash. Ante la duda, ¡no utilizarlo! Es muy molesto estar en un espectáculo nocturno y ver a la gente sacando fotos con el flash... Este suele tener un rango de acción de entre cinco a diez metros, aunque obviamente depende mucho del modelo y tipo. Demasiado cerca y el sujeto sale sobreexpuesto (cara blanca), demasiado lejos y apenas se ve. Así que toca ir comprobando a que distancia funciona correctamente (se pueden utilizar truquillos como poner papel de kleenex o similar para difuminarlo un poco, a la imaginación de cada uno) y tratar de encuadrar como se quiera utilizando el zoom. Para cualquier foto nocturna o en interiores a larga distancia (una iglesia por poner un ejemplo) suelo utilizar otros recursos. Aumentar la ISO permite aumentar la luminosidad pero crea mucho ruido (muchos puntitos) en valores muy altos. Así el recurso principal que utilizo es el tiempo de exposición. Cuanto más tiempo abierto el objetivo captando luz, más se ve. Si la cámara tiene un modo manual se regula el tiempo. Esta foto en TaiLongWan sacada con quince segundos de exposición, lo máximo que permite la Canon, aunque hay reflex que permiten aperturas de minutos.
Este tipo de fotos, sobre todo con partes fijas y partes en movimiento (las olas), pueden crear muy bonitos efectos. Para ello es necesario que la cámara esté completamente quieta, cualquier movimiento durante la exposición hace que salga desenfocada, movida. Las cámaras suelen avisar que hay poca luz con un símbolo de una mano con líneas encima, como queriendo decir que no tiembles, o con el tiempo que va a estar abierto. A valores menores de 1/30 de segundo necesito estabilización externa. Por ello suelo llevar un minitrípode (que me regalaron con la cámara) conmigo a viajes, o en su defecto busco una superficie estable (pared, roca...) donde apoyar la cámara. Para añadir más estabilidad pongo el temporizador de tal forma que ni tan siquiera tengo la vibración causada por la pulsación.
Jugando con el tiempo de exposición se pueden sacar fotos de fantasmas (gente en movimiento) o juegos de luces varios.
Todas las cámaras que he utilizado tienen al menos un -2/+2 de ajuste de brillo. Esto sirve para ayudar algo en lo anterior así como, sobre todo, para sacar "cielos más azules". Normalmente las cámaras automáticas se centran en el sujeto principal de la foto y la luz que este tiene. Así cuando saco a una persona a la que no le da el sol de cara con un paisaje, normalmente ella esta bien iluminada pero el paisaje queda sobreexpuesto (muy blanco), apenas viéndose nada. En ese caso sigo apuntando a la persona pero lo pongo en -2 o alguna cifra intermedia. Incluso si hay demasiada diferencia puedo utilizar el flash para que la cara no quede demasiado oscura, aunque teniendo un poco de cuidado porque si no puede dar cierta sensación de foto falsa.
El truco en versión más sencilla es enfocar en zonas más claras, con lo que la cámara utilizará una apertura más pequeña = menos luz = más azul. Pero hay que tener cuidado ya que la distancia que tomará la cámara para enfocar será también ese punto, con lo que si estamos enfocando algo lejano (infinito para la cámara) la persona que tengo cerca no sale enfocada.
Jugar con esto (distancia focal) da también para mucho. Enfoques rebuscados o fuera de lo normal, difuminados... Hay muchas formas de hacerlos. Para algunas se necesita material "sofisticado", lentes, filtros, procesado posterior con Photoshop o similares... Pero para empezar basta entender un poco a la cámara. Suelen tener un botón marcado con una flor o un modo llamado "macro", que sirve para sacar fotos de cosas muy cercanas. Cuando queremos sacar una foto de una flor o un insecto por ejemplo a pocos centímetros utilizamos este modo.
Así se ven todos los detalles de la flor. A su vez, al igual que el ojo, al enfocar algo muy pequeño todo el resto a cierta distancia, aunque no esté muy lejos, se difumina, como con la mesa sobre la que está la hormiga.
Me gusta mucho como recurso cuando saco fotos de flores, intentando mostrar el fondo como contraste pero difuminado. Se intuye sin ver nítidamente.
O perspectivas poco convencionales, la cabeza del perro, lo que le hace "cabezón", lo que lo hace más "mono".
A ello ayuda el ángulo desde donde está sacada la foto. Directamente desde el suelo. Probar distintos ángulos puede cambiar la fotografía completamente.
Esta foto, de nuevo desde el suelo, el camino y la persona andando dan una sensación de movimiento y profundidad. Supongo que esto es lo principal a aprender, como encuadrar, como "componer" la imagen. Me sale de forma automática, eso que se llama tener, más o menos, buen ojo fotográfico, pero si tengo que explicarlo se me ocurren ciertos conceptos/trucos. El más sencillo sería encuadrar la foto con parte del escenario mismo. Muchas veces un paisaje bonito a la vista resulta soso en la foto, basta añadir unas ramas de un árbol cubriendo la parte superior y ya tiene mejor pinta.
Mismo concepto con puertas que enmarcan completamente la imagen etc. Los caminos, vías de tren y similares también son buenos recursos parta estructurar una fotografía. Me gusta que corten la foto en diagonal o que empiecen desde muy abajo en la foto, de esa manera parece que dirijan la mirada a lo largo de la foto. La siguiente por ejemplo no da ese efecto completamente, porque está demasiado horizontal. La foto hubiera sido algo mejor si hubiera podido poner el minitrípode unos cuantos metros más hacia la derecha y así que el camino empezara más abajo en la foto guiando la vista.
Añadir personas a las fotografías ayuda. Inicialmente yo era un "postalista", me gustaba sacar fotos de paisajes sin nadie. Con el tiempo he aprendido que las personas u objetos habituales pueden dar perspectiva a la foto. El cerebro conoce su tamaño aproximado y los utiliza como referencia. Esto da efectos visuales curiosos a veces, cómo la luna que parece más grande cuando esta en el horizonte, junto a las montañas, en lugar de alta en el firmamento, aunque tenga el mismo tamaño (explicación). En la mayoría de las fotos sin embargo ayuda a ver la situación más clara, como las fotos en el monte, donde con personas las cuestas parecen más "reales".
Sin una referencia una roca inmensa en fotografía puede parecer una piedra sin más. Aparte de ofrecer esa perspectiva al componer poner "objetos" a distintas alturas hace más atractiva una fotografía, la hace menos plana. Inicialmente creo que sacaba fotos con la persona o lo que fuera que sacaba centrado, con el tiempo descubrí que queda mejor montando un poco el cuadro. Pulsar hasta la mitad el botón sobre el sujeto para que la cámara lo enfoque y posteriormente encuadrar lo que interesa. El mejor ejemplo la foto de la parejita en Camboya.
Para sacar esta foto con una cámara reflex hubiera necesitado segundos. En su lugar tardé bastante con mi carraca de Casio que tenía por aquel entonces. La única manera de sacarlos medianamente enfocados y sin "quemar" el fondo fue acercarme a ellos, medio pulsar el botón, andar hacia atrás poco a poco (cagarla un par de veces, muchas piedras en el suelo de un templo en Angkor Bhat) conseguir ponerme a la distancia que quería, encuadrar y acabar de pulsar. La foto no es muy buena, porque el sensor de aquella cámara era de lo peor para los contrastes, pero la idea es: pareja enfocada un poco por debajo del centro de la foto, luz fuera y algo difuminado por la distancia, sombras del interior. Una especie de cuadro utilizando el recurso de la puerta comentado antes.
Fotos apaisadas o verticales. Depende para qué y en qué situación. Para el blog las verticales quedan mejor. Para encuadrar me resultan más sencillas y en caso de horizontales en lugar del tamaño estándar suelo utilizar el panorámico, supongo porque es más similar a lo que ve el ojo humano. Pero como dice ama, con el tiempo los "fotógrafos" van pasando por diferentes etapas en los que nos gusta más uno u otro formato. Probar en cada caso.
También tengo en cuenta las líneas y los objetos. Si puedo intento no "romperlos". Por ejemplo no cortar un cacho de tejado de una casa, la línea del horizonte en un paisaje, una persona o un coche aunque no estén en primer plano, etc. Obviamente no se puede meter todo todo en la foto, pero cosas pequeñas como esas hacen que la foto me guste más o menos.
Creo que hay unas especie de guías (las proporciones de oro, de los tres cuartos, etc), de las que me han hablado algunos, pero ni idea. A investigar.
Un ángulo y encuadre especial, utilizando esta vez a una persona de fondo (sacada con un iPhone, que era lo que tenía a mano).
Me encantan los reflejos. Dan muchísimo juego, ya sean sobre agua, ventanas, gafas de sol... Muestran dos imágenes en una y en muchas hasta se me puede ver/intuir, cual algún pintor en su cuadro. Cuanto más limpio es el reflejo mejor, hasta el punto de poder hacer algo como esto.
Donde puse la foto del revés y aún así colaba. Aunque si te fijas está claramente del revés, ya que el reflejo no puede tener menos cosas que el original, el ángulo de la foto no sería viable etc. Pero llamativa foto de todas formas. Con reflejos solo tengo una foto pendiente que he intentado varias veces, sin éxito del todo. Una fotografía de un ojo en cuya niña se ve un paisaje. Para eso tendré que esperar a tener algo mejor material. Otro reflejo, está vez de un profesional.
Foto de Thomas Hawk
Si la fotografía es captar luz, la luz en sí puede cambiar totalmente una fotografía. Quitando toda iluminación artificial, focos, flashes, etc. la luz natural varía según las condiciones atmosféricas y la hora. Al mediodía la luz es la más "dura". Fuerte, cayendo desde arriba, prácticamente perpendicular al suelo, creando muy pocas sombras. En su lugar en las horas (o minutos) alrededor del amanecer y el anochecer la luz es lo más suave y crea muchas sombras, lo que da más sensación de profundidad y en general las fotos suelen ser más bonitas, como el naranja de arriba en un escenario que de otra manera sería bastante "feo".Podría seguir dando la chapa durante mucho más tiempo, pero acabo ya con lo principal, que es simplemente que para mejorar sólo he sacado y sacado fotos. Experimentar y poco más es lo que he hecho estos años. Por raro que parezca (para los que me conocen) he leído muy poco sobre esto, ni tan siquiera he tenido un libro al respecto en mi mano. Pero lo haré y en un tiempo espero volver a escribir al respecto.
oooooh, me ha encantado el post de hoy. Como en todas las ramas del arte, soy nula pero gran admiradora jajaja. Buen post.
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