Iurgi de excursion

17 diciembre 2006

Sistema educativo a la asiática

Seúl. Un pabellón deportivo. 10.000 adolescentes asistiendo al evento. Dos pantallas gigantes. Altavoces a toda potencia preparados. Y salen las estrellas. Sorprendentemente no es un grupo de música, sino un grupo de profesores.

El histerismo entre los coreanos ha llegado a ese punto. En un lugar donde la universidad en donde realizas tu carrera no es tan solo la entrada para un buen puesto de trabajo, sino punto de inicio de una red de influencias que servirá de por vida, los años de instituto dejan de ser ese momento de adolescencia efervescente que se tiene en la cabeza en occidente, para pasar a ser una fase decisiva y altamente estresante de la vida.

Así han ido surgiendo academias especializadas en conseguir los mejores resultados preuniversitarios. Con profesores que se han hecho millonarios con sistemas de auto estudio, o que llegan a tener que firmar autógrafos en eventos como el mencionado. Padres dispuestos a pagar lo que sea por el estudio de sus hijos. Adolescentes estudiando TODO el día.

Y Corea no es la excepción, sino el ejemplo más extremo. Aquí en Hong Kong lo veo con amigas en la universidad. En continua tensión. Competencia continua entre los alumnos. Personas que se guardan información dada por el profesor en alguna tutoría como el más preciado tesoro. Trabajos en grupo que acaban con mosqueos varios. Alguna que no puede dormir en toda la época de exámenes.

Luego tienen los mejore índices de aprendizaje, pero ¿merece la pena? ¿Dónde queda el ser adolescente? El descubrir la vida y sus placeres, el ser un poco loco, el hacer tonterías que recuerdas con cariño al de años. ¿Tendrá que ver con que luego esos mismo hongkongitas te miren y te digan que tú si que sabes disfrutar de la vida, esos que solo piensan en trabajar y consumir, tasas de intentos de suicidio por las nubes y tantas cosas que se te pueden venir a la cabeza?

Que tranquila fue mi vida de estudiante en comparación.