Cena anual

La encargada de recursos humanos de BBVA Asia me llamó hace ya unas cuantas semanas para informarme que iba a ser el MC de este año. ¿Que sería aquello de MC? Finalmente descubierto, Master of Ceremony = Maestro de Ceremonias. En la cena anual de la empresa. Nulas ganas, pero cada año le toca a dos, así que a asumirlo. De compañera de función la chica guapa de la oficina.

Como siempre la cena anual se celebra a caballo entre la navidad y el año nuevo chino, por eso de ser politicamente correctos, supongo. Un comité organizador encargado de alquilar el local, invitaciones, regalos, preparar juegos, música... Un poco recordar los viejos tiempos de monitor de tiempo libre. Objetivo de la velada: aprenderse unos cuantos nombres de la gente de la oficina, que empezamos a ser muchos. Histerismos varios, normales con un grupo de chinos que no quieren dejar ningún cabo suelto ni quedar mal frente a los jefes. Finalmente un sitio muy agradable y supongo que caro, el "Jockey Club".

Llegar allí con un par de horas de antelación. Esconder pistas, preparar regalos, discusiones de última hora y el resto de oficina que empieza a llegar. Así que toca coger el micrófono y al escenario. Sensación curiosa aunque ya conocida. En cuanto pides silencio y al de cinco segundos 70 pares de ojos te miran. Se acelera un poco el pulso y... a hacer el ganso! La verdad es que muchos se llevaron sorpresa, porque tenía fama de frío y poco hablador en la oficina. Pero si hay que ponerse, no tengo ningún problema para animar al personal, contar un par de tonterías, vacilar a alguno de los jefes. A veces me paso un poco, pero en general la impresión es buena, divertido.

Discurso inicial del jefe de Asia. Brindis. Empezar con el buffet. Premio a los compañeros que celebraban 10 años en la oficina. Juegos. Sorteos. Y en general un muy buen ambiente. Aunque, como es costumbre, en cuanto se entregó el último regalo y empezó a sonar la música para el baile, desbandada de todo el sector oriental, pero es parte del ser chino, ya al tercer año uno se acostumbra.