Iurgi de excursion

29 mayo 2007

Feng Shui.

Práctica china entre lo espiritual y la superstición. Literalmente traducido, viento y agua. El viento que mueve la energía del universo y el agua que la conserva. Porque según ello el entorno afecta la prosperidad, la salud y la suerte. Para intentar entenderlo completamente hay que adentrarse mucho en el pensamiento tradicional chino. El Chi, la energía que emite la Naturaleza. Las formas de canalizarlo o más bien como situarse y comportarse para seguir su fluir.

En Hong Kong es normal encontrarse con referencias al feng shui continuamente y a veces llega a sorprender su importancia para los locales. La posición ideal para una oficina es con las montañas detrás y el mar delante, así, en nuestro edificio hay altos directivos que han declinado la opción de utilizar los lugares con mejores vistas, simple y sencillamente porque no cumplían con ese requisito. Desde la posición en que uno se sienta en su despacho debe ser capaz de ver toda la sala. La puerta de entrada no puede estar directamente en frente de la cama. Colores, agua, espejos... Tantas cosas siguiendo reglas escritas o consejos de "expertos". Existen consultores de feng shui que analizan y dan consejos sobre una nueva casa u oficina, donde situarla, como construirla, decorarla... No solo en China, comienza a ser normal también en otras partes del planeta.

El más de lo más es el edificio del Bank of China. Uno de los edificios más espectaculares de la isla, artista principal en el espectáculo de luces al anochecer, que llega a sorprender a los turistas. Pero para los locales un generador de muy mal feng shui. Sus afiladas esquinas parecen dagas que mandan energía negativa, casualmente apuntando al edificio que en su día albergaba al gobernador británico, con lo que muchos piensan que se hizo a propósito por el gobierno chino frente a lo que consideraban su "enemigo". Curiosamente el IFC 2 está en esa misma línea imaginaria, así que cuando el Banco se trasladó a este edificio los locales relacionaron la caída en los resultados al mal feng shui. Desde entonces he ido viendo como los más "creyentes" evitaban estar sentados frente a la "daga", como objetos varios han aparecido frente a ella para disipar su efecto, etc.

Y yo lo miro con ojos curiosos, como quien mira cualquier otra creencia sin compartirla.

25 mayo 2007

Comprar o ser comprado

Las aguas están revueltas en la oficina. Bueno, realmente a mi alrededor calma chicha. Pero los locales, la base de la pirámide, contabilidad, administración, atención al cliente... están nerviosos. Todo por una noticia aparecida en prensa.

Por segunda vez se comenta que Citikawah, el banco hongkongita del grupo Citic, con el que se llegó a un principio de acuerdo hace unos meses, va a comprar todo el negocio de BBVA Asia. Realmente los contactos han sido continuos, parece ser que se va hacia una integración, pero comprar o ser comprado es diferente. Suena diferente. Sí, cuando tú eres parte del negocio comprado, cuando pasas a ser parte de algo mucho más grande, cuando sabes que sus condiciones de trabajo son peores, cuando no tienes mucho más valor añadido que el propio que ofrecías a la empresa por conocerla a ella y a sus clientes y sabes que en estas integraciones los despidos no son extraños.

Yo la verdad es que no tengo ni idea. El tiempo dirá que es lo que ocurre. Aunque mi posición sea un tanto distinta a los locales en bastantes sentidos. Tiempos de cambio se atisban en el horizonte.

18 mayo 2007

Desayunando en Hong Kong

Yo sigo haciéndolo en casa, como siempre, distintos tipos de cereales, leche, a veces algo de embutido, o yogur, etc. Nada más levantarme y ducharme. Una vez terminado, ponerme el mono de trabajo (léase traje y corbata) y a la oficina.

Y cuando llego allí tengo ya a la mayoría de los locales sentados en su sitio. Ordenador encendido, ratón en mano, ups, pero empiezas a ver alguna cosa por ahí... ¿Eso parece un sandwich y un brik de batido?

La verdad es que ya estoy acostumbrado. Es lo habitual para ellos. Desayunar en la oficina. Normalmente todos ellos tienen en la oficina los cereales, avena instantánea o similares, que calientan con agua, o sino antes de llegar pasan por uno de los restaurantes de comida rápida donde compran de todo, empezando por tostadas y café hasta el plato de noodles. Luego se sientan delante del ordenador y allí que se toman su desayuno.

Hoy el informático tenía un clásico, plato de pasta y carne en sopa.

Para empezar el día con fuerzas ^__^

04 mayo 2007

Luchador de sumo

Estos días estoy bastante ocupado con la recta final del curso de entrenador personal. Músculos, ligamentos, entrenamientos, lesiones, nutrición... Es curioso ir aprendiendo formalmente cosas que más o menos sabía y ver como muchas veces van en contra de lo que cree y hace mucha gente. He encontrado una comparación que tal vez resulte interesante. Un luchador de sumo intentando ganar peso.

¿Qué hace? Lo primero, evitar desayunar. Tras ocho horas de sueño y sin alimento el cuerpo ralentiza el metabolismo intentando quemar la menor energía posible.

Hacer ejercicio con el estómago vació. No hay gasolina, carbohidratos, en el sistema, así que el cuerpo tiene que destruir tejido (no se quema grasa hasta que llevas 20-30 minutos de ejercicio y dependiendo de la intensidad, ni entonces), ralentizando aún más el metabolismo.

Gran comida. Con apetito voraz causado por todo lo anterior son capaces de comer cantidades industriales de comida, con una gran proporción de proteínas y grasas (Chankonabe), acompañadas de alcohol.

Siesta de cuatro horas. Ralentizar el metabolismo de nuevo y facilitar que el cuerpo guarde reservas para la próxima vez que esté falto de nutrientes.

Segunda y última comida abundante y justo antes de irse a la cama, rodeado de colegas, en un entorno que facilita comer hasta un 30-40% más de lo que comerían solos.

Si no gana suficiente peso, añadir comidas con gran cantidad de azúcares.

¿Y qué se me viene a la cabeza? Toda esa gente preocupada por su peso que se saltan comidas, que comen dulces entre horas, que no desayunan pero se meten grandes banquetes de cena, la frasecita de "no me comes nada" cuando te juntas para cenar, el que va a correr antes de desayunar...

Recetas mágicas ninguna, pero si algunas ideas. Hacer todos los días un poco de ejercicio acorde a edad y condición física. No saltarse comidas. 5 comidas mejor que 3. Desayunar más, cenar menos. Aprender cosas básicas de nutrición. Aprender a disfrutar de cosas sanas.

Creo que empiezo a sonar ya como un verdadero entrenador personal ^__^