Primera capa = first layer
Hace un tiempo me preguntaban en un post antiguo qué utilizaba para evitar las rozaduras. Así que aquí van mis andanzas con material deportivo vario. Primero decir que soy un poco desastre para muchos, un "reutilizador" bajo mi perspectiva. Me gusta utilizar las cosas todo lo que puedo. A algunas les saco de quicio con eso de que siga llevando años y lustros después la misma ropa. Tanto como para que algunos en mi cumpleaños me regalaran 25 pares de calcetines :P
El siguiente descubrimiento fue el bodyglide. Ya en la playa, trabajando de socorrista, recuerdo a los nadadores medio "profesionales" que tenía como compañeros utilizando grandes botes de vaselina, que se untaban antes de nadar largas distancias. El bodyglide es la versión moderna de lo mismo. O en sobrecitos individuales con gel dentro o en barra, que es el que suelo utilizar habitualmente.
Calcetines y calzado. Durante mucho tiempo no les presté mucha atención. Cada vez que iba a comprarme unas zapatillas para correr, aunque fuera con toda mi sana intención de invertir en ellas, acababa con similares Reebok a las que había estado utilizando durante años. No notaba la diferencia, así que acababa con calzado de gama media baja. Hasta que con el acuatlón de larga distancia me forcé a pasarme unas cuantas horas de compras, probando nuevas marcas, no conocidas para mí. Así di con las Asics, que me agarraban el pie como un guante. Aprovechando descubrí que también existían modelos específicos de calcetines para correr y evitar las ampollas. Normalmente suelen ser de material de secado rápido, bastante delgados, con costuras mínimas, algunos refuerzos o almohadillas en algunos casos y diferente forma para el pie derecho y el izquierdo.
Es lo que hay. Al ritmo que llevo el material deportivo hay que renovarlo bastante asiduamente. Para los que se pregunten si hay algún principio al respecto, dependiendo de las zapatillas, pero se suele hablar de una vida media de 600 a 900 kilómetros para una zapatilla decente, hasta que empieza a perder prestaciones: suela gastada, amortiguación que no funciona correctamente, etc. Yo ya empiezo a tener mi propio cálculo para cada cosa, pero la mayoría de las veces se ve a simple vista. Como las gafas de nadar. Mismo modelo, unas recién estrenadas, las otras con seis meses de muuucho nadar.
Lo último que estoy utilizando, y casi volviendo al principio del post, es material para comprimir el músculo. En mi caso unas gemeleras.
Para preguntas y dudas los comentarios y si eso vuelvo a escribir otra tocho.
(1): Un bonito debate que llevo siguiendo desde hace unos años es el de los "corredores descalzos". Desde que se publicó con gran éxito el libro "Nacidos para correr" (Born to run) y hacerlo descalzo o con zapatillas minimalistas como las Vibram empezó a ser más habitual entre algunos. Los que abogan porque los avances en las zapatillas de los últimos 30 años, con sus agarres y amortiguación, no han producido ningún progreso, sino más bien lo contrario. Y los que opinan que algunos bien dotados pueden correr descalzos pero que la tecnología sí que ayuda a una mayoría con pequeños problemas de pies planos, pronadores, supinadores, etc. Por ahora no lo he intentado, pero tal vez algún día.
El siguiente descubrimiento fue el bodyglide. Ya en la playa, trabajando de socorrista, recuerdo a los nadadores medio "profesionales" que tenía como compañeros utilizando grandes botes de vaselina, que se untaban antes de nadar largas distancias. El bodyglide es la versión moderna de lo mismo. O en sobrecitos individuales con gel dentro o en barra, que es el que suelo utilizar habitualmente.
Calcetines y calzado. Durante mucho tiempo no les presté mucha atención. Cada vez que iba a comprarme unas zapatillas para correr, aunque fuera con toda mi sana intención de invertir en ellas, acababa con similares Reebok a las que había estado utilizando durante años. No notaba la diferencia, así que acababa con calzado de gama media baja. Hasta que con el acuatlón de larga distancia me forcé a pasarme unas cuantas horas de compras, probando nuevas marcas, no conocidas para mí. Así di con las Asics, que me agarraban el pie como un guante. Aprovechando descubrí que también existían modelos específicos de calcetines para correr y evitar las ampollas. Normalmente suelen ser de material de secado rápido, bastante delgados, con costuras mínimas, algunos refuerzos o almohadillas en algunos casos y diferente forma para el pie derecho y el izquierdo.
Es lo que hay. Al ritmo que llevo el material deportivo hay que renovarlo bastante asiduamente. Para los que se pregunten si hay algún principio al respecto, dependiendo de las zapatillas, pero se suele hablar de una vida media de 600 a 900 kilómetros para una zapatilla decente, hasta que empieza a perder prestaciones: suela gastada, amortiguación que no funciona correctamente, etc. Yo ya empiezo a tener mi propio cálculo para cada cosa, pero la mayoría de las veces se ve a simple vista. Como las gafas de nadar. Mismo modelo, unas recién estrenadas, las otras con seis meses de muuucho nadar.
Lo último que estoy utilizando, y casi volviendo al principio del post, es material para comprimir el músculo. En mi caso unas gemeleras.
Para preguntas y dudas los comentarios y si eso vuelvo a escribir otra tocho.
(1): Un bonito debate que llevo siguiendo desde hace unos años es el de los "corredores descalzos". Desde que se publicó con gran éxito el libro "Nacidos para correr" (Born to run) y hacerlo descalzo o con zapatillas minimalistas como las Vibram empezó a ser más habitual entre algunos. Los que abogan porque los avances en las zapatillas de los últimos 30 años, con sus agarres y amortiguación, no han producido ningún progreso, sino más bien lo contrario. Y los que opinan que algunos bien dotados pueden correr descalzos pero que la tecnología sí que ayuda a una mayoría con pequeños problemas de pies planos, pronadores, supinadores, etc. Por ahora no lo he intentado, pero tal vez algún día.
posted by iurgir at
8:44 a. m.
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