Comienza la temporada de carreras de montaña en Hong Kong. Y ya con objetivos en la cabeza. La primera la
East Aquathon 16.3: 1,5km nadando, 7,5km corriendo por senda bastante empinada y acabar con 7,3km de asfalto también en cuesta.
Apuntado y entrenando. También me toca hacer algo que no había hecho en años: la carrera se considera benéfica y cada participante tiene que capatar fondos para una de las ONGs locales, la
Sedan Chair Charities Fund.
Entre muchas causas centrada en ayudar a niños de familias desustrucuradas, niños que han sufrido abusos, autismo, etc. Así que estoy, con la ayuda de las nuevas tecnologías solicitando aportaciones.
Solo hay que ir a la
página web y en un par de pasos sencillos (pinchar en Donate y poner los datos correspondiente) hacer la aportación.
Lo último que comenté sobre carreras fue el "éxito" en la
Lantau 2 Peaks del pasado octubre. Desde entonces muchas cosas pasaron. Seguí corriendo bastante y descubrí mucho sobre correr, siguiendo con esa máxima de que de los errores es de lo que realmente se aprende. La primera cosa que confirmé es que a partir de cierta distancia hay que seguir reforzando la musculatura, incluso en algunas partes que no había pensado nunca. Para empezar ¡los pies! Obvio ahora. A fin de cuentas cada paso, cada zancada caes sobre el pie. Pero nunca me había puesto a pensar que tan siquiera hubiera músculos ahí abajo de los que hubiera que preocuparse.
Durante el entrenamiento para la carrera ya había notado en algún momento algún pinchazo, incómodo, como si se hubiera metido una piedra en el zapato o similar, aunque no hubiera nada. Pensé que sería de alguna bajada brusca y como la cosa no siguió, ni me preocupé. Sin embargo, tras la carrera empezó a molestar más e investigando un poco descubrí que podrían ser los primeros síntomas de una
fascitis plantar. Simplificando mucho la fascia recorre toda la planta del pie y hace de muelle o de arco que sustenta todo el peso. Si no es suficientemente fuerte y se corre mucho o de mala manera se acaba reventando. Así que me tocó bajar un poco el volumen de entrenamiento y aprender que
ejercicios hacer para reforzar todo el pie y hacerlo más flexible. Muy curioso eso de descubrir una parte del cuerpo y ponerla a funcionar de verdad. Ahora tengo mucha más agilidad con los dedos del pie, tanto como para coger cosas ellos con mucha mayor facilidad. Aunque no llego a la técnica depurada de alguna, que es capaz incluso de pellizcar...
Así que en el siguiente reto que tenía en el calendario, la carrera de King of the Hills en Saikung, decidí hacer la versión "corta": media maratón bastante plana (solo 700-800 metros de desnivel) pero bien metida entre la vegetación (como se puede
ver en las fotos).
El resultado bastante aceptable: 1h49m, séptimo, a siete minutos del vencedor, segundo de mi categoría. Miao bajando un poco a la realidad. En esta carrera corta, a diferencia de la anterior, la competencia era bastante más seria, así que acabó decimoquinta entre las chicas y novena en su categoría, 2h25m. Muy bien de todas formas para una recién llegada a este mundillo. Pero me hizo gracia que se mosqueara tanto porque hubiera tanta chica que le hubiera dejado atrás, algunas una década o dos más mayores que ella.
Originalmente la idea era ir añadiendo volumen de kilómetros en horizontal, bajar la pendiente, con vistas a hacer mi primera maratón en
la Standard Chartered, la carrera popular número uno de Hong Kong. Ya había hecho alguna salida de más de cuarenta kilómetros,
corriendo desde Kanala a Bilbao. Además buena parte del recorrido sobre pistas de tierra con colinas. Así que me veía capacitado para correr la distancia. En el gimnasio la cinta en plano, ir haciendo entrenamientos de velocidad, tanto con series (el clásico 1500m y descanso, 1500m y descanso...) como tempos varios. Los fines de semana, y de
vacaciones en Birmania, meterme tiradas largas sobre asfalto. Miao también se apuntaba a parte, ella con la media maratón como objetivo.
A cuatro semanas de la carrera quise hacer un chequeo de como estaba, porque las primeras estimaciones eran de hacer un tiempazo (alrededor de las tres horas para una primera maratón). Así que intentar en la cinta en el gimnasio hacerme 30 kilómetros a velocidad constante. 14 kilómetros por hora aguantados perfectamente durante 99 minutos (lo máximo que permitía esa máquina), poner la máquina otra vez en marcha y otros 4 kilómetros más de nuevo a 14kph. Ups. Ligera molestia en la rodilla y empezando a notar bastante fricción en la planta del pie. Entre eso y que tenía que buscar piso decidí parar. Supongo que en buena hora.
Los siguientes días molestia en la rodilla continua. A eso se le añadió que no veía nada claro correr la maratón con lo que me estaban contando. Básicamente hay tanta gente que se quiere apuntar que en cuanto abren la inscripción vía web se llena en minutos. Al final conseguí apuntarme, pero en la tanda de la gente que esperaba hacer la carrera sobre las cinco horas... Hablando con distinta personas me confirmaron que habría un montón de gente que aunque estuviera en la primera tanda (por debajo de cuatro horas, segunda entre cuatro y cinco, tercera la mía) tardaría cinco o seis horas. Que muchos se apuntaban a la tanda "competitiva" (challenge) solo para tener 30minutos más de tiempo de corte. Uf... En cualquier otro sitio la gente suele ser educada, se ordena por tiempos, los rápidos delante, los lentos detrás. Aquí no. Así que estaría pegándome intentando adelantar gente durante 42 kilómetros. Eso más la rodilla, más estar en
proceso de traslado de apartamento... Decidí hacer un cambio. Uno de los
HKTrailRunners había tenido incluso menos suerte con la web y solo había podido apuntarse a la media maratón, pero la tanda más rápida. Es bastante más lento que yo, así que salir en la tercera tanda de la maratón completa no era problema para él. Así que cambiamos dorsales.
Entrenar bastante más relajado. Darle tiempo a la rodilla a recuperarse del todo. Última tirada larga de 25 kilómetros una semana antes. Descansar bien la semana de la carrera. Y mucho antes del amanecer del domingo 16 de febrero ¡a correr! De
la vez anterior ya sabía que tenía que estar bien pronto en la salida o un montón de gente lenta me cerraría el paso. Así que llegar a las inmediaciones, dejar la bolsa con la ropa,
octopus y varios para la vuelta, calentar rápido y hacia la salida con prácticamente media hora de adelanto. Para entonces bastante gente agolpada, pero podía ver el arco relativamente cerca. Bien. Seguir dando un poco de botes y estirar como bien puedo (poco). 13,5 grados y un 85% de humedad. Fresquete. Unas cuantas camisetas destrozadas extra encima. En cuanto empieza la cuenta atrás quitármelas y preparado para correr. 3, 2, 1 goooooooooo! Muy bien, nada de andar al principio, correteando un minuto y después a correr de verdad. Cogiendo velocidad. Pasando a unos cuantos. Salirse de Nathan Road. Carretera por debajo de la oficina. Allí ya en fila de a uno. Un chaval con pinta de corredor al que le pregunto "¿por debajo de la hora y media?", a lo que me responde que espera que sí, pero no sabe. Le sigo. Completamente de noche aún. Tengo la sensación de que vamos demasiado rápidos. El recorrido es de todo menos plano. Continuo sube y baja no excesivamente pronunciado, pero que se acaba notando. Al de unos kilómetros dejo al chaval que se marche, demasiado rápido, mejor seguir mi ritmo. Al de poco llegar al punto de retorno cerca del puente que va a Tsig Yi, donde me vé desde el otro lado de la carretera y me dice que le siga. "Nanai", mi carrera. El reloj me dice que voy bien. Veo un grupo que tiene mejor pinta. Una chica con buena cadencia y un local bastante grande que le sigue. Yo detrás de ellos, perfecto para quitarme el viento de cara. De vez en cuando se cansan y me toca pasarles, subiendo principalmente, casi como si estuviéramos dándonos relevos o en competición encarnizada. Llegar al punto más alto en la parte de Kowloon y para abajo hasta el túnel, la mitad de la carrera ya pasada.
Conocía el túnel de veces anteriores, desagradable zona, si no estás preparado. Estar por debajo del nivel del mar, la pendiente, el aire menos fresco... Pero mejor esta vez. Con los que iba antes perdidos ya detrás. Seguía dándole sorbos a mi botella con bebida isotónica/energética. Decidí correr como si fuera una carrera de montaña, con mi riñonera y botella, porque no me fiaba mucho de los avituallamientos. Buena opción, porque había una @#¢¢∞ considerable en ellos, además con vasitos de papel... A lo mío. Empezar el sube baja continuo de la Isla. Ir viendo posibles "ruedas" a las que seguir, pero nadie que pareciera tener un ritmo constante. Así que por mi cuenta. Mucho viento. El amanecer que no llega. Apretar un poco más al final, pero no excesivo y 1h28m30s el crono final. 4 minutos largos más rápido que seis años atrás. Veo al chaval del principio que me dice que ha bajado de la hora y veinticinco minutos. Ya decía yo... Y Miao, con medio esguince de tobillo y todo (es más bruta que un arado), dejando detrás a sus compañeros de trabajo y muchos de nuestros amigos/conocidos con una marca final de 1h53min.
Se acabó el cemento y el asfalto por una buena temporada. No me gustan. Confirmado. Mucho más divertido entrenar con pendientes, por el monte, mis rocas, el riachuelo, uy
que me resbalo :P Con cuidado siempre, tranquilos.
Teniendo en cuenta que no tenía ninguna carrera ni nada en mente, decidí intentar entrenar más minimalista todavía. La
chapa de las zapatillas que conté y meterme un poco de caña con las NB con las que voy a ras de suelo. No me di suficiente tiempo para acostumbrarme y gemelo cargado. Un clásico. Así que parar unas semanas y volver con ganas a otro tipo de entrenamiento y muchos hikings para prepararnos para
Nepal. Tras ello volver a correr por montaña todos los findes. La idea original era presentarnos este año al Lantau 2 Peaks y correr en la versión parejas mixta. Pero entre una caída de Miao bajando Sunset Peak y que se torció unas cuantas veces el tobillo, por la calle sin más, al final descartado. Por mi cuenta principalmente y alguna salida con los
HKTrailRunners.
En julio, de nuevo corriendo en la cinta volví a notar un poco la rodilla y el fin de semana de hiking ídem. Ummmm... Antes había pensado que el exceso de entrenamiento en asfalto y plano podrían haber sido la causa, a diferencia de en montaña acabas cayendo continuamente prácticamente en la misma posición, lo que es mucho más duro para la articulación. Esta vez también las zapatillas podían tener algo que ver. Las Asics ya habían pasado los 800km y seguía con ellas. Pero no. Había algo más.
Leyendo e investigando descubrí lo que es obvio ahora para mí. Este... El problema no estaba en la rodilla sino en mi cadera. Igual que los pies me habían avisado que algo no estaba suficientemente fuerte como para la tralla que me estaba metiendo, la cadera también me había avisado un par de veces. Sensación de cargado, incluso pequeño tiron. Pero no le presté atención, nunca había tenido molestias serias allí. Lo que ocurre es que unos cuantos músculos que salen de la cadera llegan hasta la rodilla y si no hacen su labor correctamente, estabilizando la articulación, la rodilla tiene que trabajar de más (explicación un poco a lo bruto) y genera dolor. ¡Ahhhh! Entendido. Así que tocó aprender, estoy todavía en proceso, a estirar la
banda iliotibial, reforzar la musculatura lateral de la pierna y varios. De nuevo lo cogí a tiempo antes de que me hiciera daño de verdad. Aunque ya podría haber chequeado cuales son las lesiones habituales de los corredores, porque esta y la de los pies están en el top. Haciéndome un corredor más fuerte y flexible. No está mal.
No tenía muy claro si quería correr este año alguna carrera (el 2 Peaks cae en un fin de semana bastante malo, con posibilidad de puente fuera), hasta que surgió el Aquathon mencionado arriba. Primera vez que lo montan. Nadar y correr. Buen recuerdo
del último que hice de distancia larga y además con partes sobre sendas por donde suelo correr. Apuntado. Y así cierro el post. Ya informaré que tal.
Gracias por su atención y donaciones :D