La nocrisis y la montaña(burbuja)rusa
Cuando volví a casa una de las preguntas que cayó unas cuantas veces fue "y ¿qué tal la crisis por Hong kong?". La respuesta en inglés sería "non-existent", usease, nada de nada. Se dejó de hablar de crisis hace ya meses y, si bien se mira con cautela la situación en Europa y Estados Unidos (que siguen siendo los grandes compradores de productos asiáticos), las cifras no dejan de mejorar. La tasa de desempleo cayó hasta el 4.3% en el último trimestre, se espera un aumento del PIB a cierre de año del 6% y las ganas consumistas se han disparado desde hace ya bastante tiempo. Amig@s de nuevo cambiando de trabajos, colas para comprar iPhones, ventas al por menor que suben.
Y al mismo ritmo, elevado a N, el mercado inmobiliario. Ya hablé de la especulación inmobiliaria, pero desde noviembre hasta ahora el tema ha seguido evolucionando. Los precios han subido un 45% desde comienzos de 2009 y ya se empieza a comentar que están acercándose, o superando, a aquellos que precedieron al estallido de la burbuja anterior en 1997.
Si todo lo anterior no fuera suficiente, la situación especial que se mantiene con la China continental, conocido como "un país, dos sistemas", hace que muchos chinos decidan invertir en ladrillo en la isla. Distintas razones. La que más me sorprendió es que podían conseguir un permiso de permanencia aquí (para la mayoría de cosas relacionadas con pasaporte y visados Hong Kong es independiente y deseado por los chinos continentales) al hacer una inversión superior a X HKD y la compra de la casa cualifica igualmente (Capital Investment Entrant Scheme). Eso, más que aquí se siguen reglas de mercado "occidentales", frente al gobierno chino que a veces para enfriar el mercado inmobiliario entra "a machete" con reglas e impuestos ad hoc muy brutas. Que si bien el yuan no es divisa de libre circulación en el mundo, en Hong Kong ya es parte del sistema bancario, etc. Todo ello hace Hong Kong muy apetecible para las nuevas fortunas chinas. Así los precios de los inmuebles de "alta gama" se han disparado. Y en menor medida, pero también muy considerablemente el resto.
Uno de los hitos que más se tienen en cuenta para tomar el pulso del mercado son las subastas de suelo construible. Los periódicos avisan con adelanto cuando van a ocurrir y los análisis posteriores llegan a primeras planas. Con los principales constructores pujando.Y cifras que desbordan últimamente las expectativas iniciales por bastante.Y el efecto de las mismas se nota instantáneamente. Si una subasta se dispara, los pisos de edificios cercanos a esa zona suben de precio el mismo día. Un 10-20% sin ningún problema de un día para otro, tachado el precio anterior y puesto el nuevo. "¡Haber venido ayer!"...
El gobierno lleva un tiempo tomando distintas medidas para parar todo esto. De todo tipo, empezando por controlar la publicidad engañosa que ya mencioné, limitando las recompras sobre plano (en algunos casos se han dado docenas de compras y ventas sin haber nada construido), pidiendo a los bancos que aumenten los requerimientos para dar hipotecas, etc. Pero aún así parece un poco fuera de su control. En parte porque incluso los hongkongeses tienen interiorizado que viven en un continuo sube y baja, parecido a una montaña rusa.
Lo que me resultó extraño en su día, pero que ya veo como algo que es parte de los locales, es que muchos gustan de jugar a esta ruleta. Recuerdo una chica de la oficina, alrededor de los treinta, a la que vi navegando en un portal inmobiliario. Le pregunté si estaba buscando un nuevo piso para alquilar y me dijo que sí, que visto lo que habían subido los precios estaba pensando en vender su casa, estar de alquiler unos años y cuando los precios bajaran (según su estimación no más de dos años) volver a comprar una nueva. Y ahí es cuando empecé a entender porque muchas casas de conocidos me daban la impresión de ser un poco "de paso", no un sitio que consideras un hogar, algo que sientes realmente como tuyo y al que le tienes un cariño especial, sino meras inversiones, lugares de paso en los que quieres vivir a gusto, pero que no llegan a ser lo que yo consideraría "mi casa". Distinta mentalidad.
Para cerrar el post mencionar los "vendedores ambulantes". Video grabado disimuladamente con el móvil mientras entraba al IFC, el centro comercial debajo de la oficina.Al menos todos los marcados, 14, eran agentes inmobiliarios. Durante semanas allí, a veces incluso en mayor número, como si estuvieran de incógnito, con los panfletos escondidos a la espalda, hasta que se acerca alguien con pintas de comprador y a por él! De tanto verlos empecé a saber a quien iban a "atacar". Los occidentales no somos objetivo, chinos, parejas alrededor de los 50, vestidos informalmente pero con ropa de marca bien puestos, los más deseados. En oferta pisos de lujo, urbanizaciones de alto estánding y yo preguntándome si realmente pueden convencer a alguien así, en la calle, para tan siquiera considerar una compra de ese volumen... Hong Kong...
Y al mismo ritmo, elevado a N, el mercado inmobiliario. Ya hablé de la especulación inmobiliaria, pero desde noviembre hasta ahora el tema ha seguido evolucionando. Los precios han subido un 45% desde comienzos de 2009 y ya se empieza a comentar que están acercándose, o superando, a aquellos que precedieron al estallido de la burbuja anterior en 1997.
Luces y obras junto a la oficina (tierra reclamada al mar)
Si todo lo anterior no fuera suficiente, la situación especial que se mantiene con la China continental, conocido como "un país, dos sistemas", hace que muchos chinos decidan invertir en ladrillo en la isla. Distintas razones. La que más me sorprendió es que podían conseguir un permiso de permanencia aquí (para la mayoría de cosas relacionadas con pasaporte y visados Hong Kong es independiente y deseado por los chinos continentales) al hacer una inversión superior a X HKD y la compra de la casa cualifica igualmente (Capital Investment Entrant Scheme). Eso, más que aquí se siguen reglas de mercado "occidentales", frente al gobierno chino que a veces para enfriar el mercado inmobiliario entra "a machete" con reglas e impuestos ad hoc muy brutas. Que si bien el yuan no es divisa de libre circulación en el mundo, en Hong Kong ya es parte del sistema bancario, etc. Todo ello hace Hong Kong muy apetecible para las nuevas fortunas chinas. Así los precios de los inmuebles de "alta gama" se han disparado. Y en menor medida, pero también muy considerablemente el resto.
Uno de los hitos que más se tienen en cuenta para tomar el pulso del mercado son las subastas de suelo construible. Los periódicos avisan con adelanto cuando van a ocurrir y los análisis posteriores llegan a primeras planas. Con los principales constructores pujando.Y cifras que desbordan últimamente las expectativas iniciales por bastante.Y el efecto de las mismas se nota instantáneamente. Si una subasta se dispara, los pisos de edificios cercanos a esa zona suben de precio el mismo día. Un 10-20% sin ningún problema de un día para otro, tachado el precio anterior y puesto el nuevo. "¡Haber venido ayer!"...
El gobierno lleva un tiempo tomando distintas medidas para parar todo esto. De todo tipo, empezando por controlar la publicidad engañosa que ya mencioné, limitando las recompras sobre plano (en algunos casos se han dado docenas de compras y ventas sin haber nada construido), pidiendo a los bancos que aumenten los requerimientos para dar hipotecas, etc. Pero aún así parece un poco fuera de su control. En parte porque incluso los hongkongeses tienen interiorizado que viven en un continuo sube y baja, parecido a una montaña rusa.
Lo que me resultó extraño en su día, pero que ya veo como algo que es parte de los locales, es que muchos gustan de jugar a esta ruleta. Recuerdo una chica de la oficina, alrededor de los treinta, a la que vi navegando en un portal inmobiliario. Le pregunté si estaba buscando un nuevo piso para alquilar y me dijo que sí, que visto lo que habían subido los precios estaba pensando en vender su casa, estar de alquiler unos años y cuando los precios bajaran (según su estimación no más de dos años) volver a comprar una nueva. Y ahí es cuando empecé a entender porque muchas casas de conocidos me daban la impresión de ser un poco "de paso", no un sitio que consideras un hogar, algo que sientes realmente como tuyo y al que le tienes un cariño especial, sino meras inversiones, lugares de paso en los que quieres vivir a gusto, pero que no llegan a ser lo que yo consideraría "mi casa". Distinta mentalidad.
Para cerrar el post mencionar los "vendedores ambulantes". Video grabado disimuladamente con el móvil mientras entraba al IFC, el centro comercial debajo de la oficina.Al menos todos los marcados, 14, eran agentes inmobiliarios. Durante semanas allí, a veces incluso en mayor número, como si estuvieran de incógnito, con los panfletos escondidos a la espalda, hasta que se acerca alguien con pintas de comprador y a por él! De tanto verlos empecé a saber a quien iban a "atacar". Los occidentales no somos objetivo, chinos, parejas alrededor de los 50, vestidos informalmente pero con ropa de marca bien puestos, los más deseados. En oferta pisos de lujo, urbanizaciones de alto estánding y yo preguntándome si realmente pueden convencer a alguien así, en la calle, para tan siquiera considerar una compra de ese volumen... Hong Kong...